30X30: Mitos y realidades. ¿Qué es 30X30 y por qué es importante?
La administración del presidente Joe Biden ha establecido el objetivo de conservar el 30% de la tierra y agua de Estados Unidos para el año 2030. Este objetivo, conocido como “30×30”, ha sido recomendado por científicos de todo el mundo para prevenir el colapso de los sistemas naturales del planeta y al mismo tiempo apoyar a las comunidades de todo el país. Busca, asimismo, ayudar a frenar la pérdida de biodiversidad, mitigar los impactos del cambio climático y garantizar que todas las personas, sin importar su situación económica, raza u origen étnico, tengan acceso a la naturaleza.
Azul celebra este compromiso, pues desde nuestra creación hemos abogado por un mandato nacional 30X30 basado en la equidad y uno que coloque la justicia ambiental al centro de su enfoque. La iniciativa 30×30 es realmente innovadora, porque se centra en ambas cosas.
No obstante, no faltan quienes se muestran escépticos y tratan de difundir información errónea sobre el tema. Es por eso que aquí, hemos decidido dejar algunas cosas claras sobre 30X30. Lo que es; lo que no es y por qué es importante.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
30×30 es un mandato de la administración Biden que no refleja las necesidades reales de las comunidades y personas de todo el país.
No. 30×30 es un objetivo nacional, basado en la ciencia, impulsado por esfuerzos de conservación liderados y respaldados localmente para ayudar a frenar la pérdida de la naturaleza desde cero. 86% de los votantes en los Estados Unidos, incluidas las fuertes mayorías bipartidistas, apoyan la protección del 30% de nuestras tierras y océanos para el año 2030. Al igual que el cambio climático, la pérdida de la naturaleza es una amenaza existencial para las comunidades y la economía estadounidense. Cualquier esfuerzo para acelerar el ritmo de la conservación debe ser impulsado por las partes interesadas locales, incluidas las comunidades rurales, las naciones tribales, los propietarios privados de tierras, los pescadores y muchos otros en la primera línea de la custodia, el uso y el disfrute de la naturaleza. Al trabajar juntos, podemos salvaguardar los recursos naturales, los medios de vida y las culturas que dependen del acceso al aire libre y restaurar las tierras y aguas degradadas que han dañado la calidad de vida de las personas en todo el país.
El 30% es un objetivo arbitrario establecido con fines políticos, no científicos
El objetivo 30×30 para Estados Unidos es un reconocimiento, basado en la ciencia, de que necesitamos acelerar el ritmo y la escala de la conservación para frenar la pérdida de la naturaleza y mejorar los peores impactos del cambio climático. Es un objetivo ambicioso, pero también razonablemente alcanzable dentro de la década.
Existe un amplio acuerdo entre los científicos de que no hemos conservado lo suficiente de nuestras tierras, aguas continentales y océanos para frenar la pérdida de la naturaleza, salvaguardar la biodiversidad y mantener pesquerías y poblaciones de vida silvestre saludables. Un creciente consenso de científicos sugiere que tendremos que proteger el 30% de los océanos y las tierras del planeta para enfrentar la escala de desafíos que enfrenta la naturaleza, y muchos científicos dicen que, en última instancia, necesitaremos conservar incluso más del 30%.
Mucha gente dice que en realidad será el 50% para 2050 y que 30×30 es solo una solución arbitraria en el camino
30×30 es el objetivo adecuado en el momento adecuado. Se basa en la ciencia y, lo que es más importante, se puede lograr. La iniciativa 30×30 hará un progreso significativo hacia la protección de áreas naturales, expandiendo el acceso de las personas al aire libre y protegiendo a las comunidades de los peores impactos del cambio climático. 30×30 apoya la conservación crítica respaldada por la comunidad para proteger las cuencas hidrográficas, los humedales y las costas antes de que se pierdan por el desarrollo.
30×30 impone mandatos atroces a los propietarios privados. Es un acaparamiento de tierras
La conservación de la tierra privada siempre ha sido voluntaria. Cualquiera que afirme lo contrario, o que diga que 30×30 es un intento de impedir los derechos de propiedad privada, miente sobre los objetivos y prioridades de la iniciativa 30×30.
Los agricultores, pescadores, ganaderos y propietarios privados son algunos de los conservacionistas más eficaces de Estados Unidos. La iniciativa nacional 30×30 reconoce a aquellos que administran, usan y disfrutan de la naturaleza trabajan juntos mediante el despliegue de las herramientas y los recursos necesarios para ayudar a los esfuerzos de conservación privados voluntarios, que durante mucho tiempo han sido un baluarte contra el declive de la naturaleza. 30×30 es una oportunidad crítica para apoyar a los propietarios privados comprometidos con la protección de su propiedad al proporcionar los recursos financieros y los incentivos para que los propietarios y el sector privado restauren las áreas naturales degradadas y administren sus recursos de manera sostenible.
30×30 es un esfuerzo para bloquear las tierras de uso múltiple y limitar los usos tradicionales que son el elemento vital de las comunidades rurales
Cada 30 segundos, un espacio equivalente a una cancha de football de las áreas naturales de Estados Unidos desaparece en carreteras, casas, tuberías y otros desarrollos. La iniciativa 30×30 reconoce que la naturaleza es la columna vertebral de las comunidades rurales y debemos apoyar los esfuerzos para proteger las tierras, las aguas y la vida silvestre. Al confiar en expertos locales que usan y aman nuestras tierras públicas, desde ganaderos y pescadores hasta conservacionistas, recreacionistas, cazadores y pescadores, 30×30 puede cumplir con la escala de los desafíos que enfrenta la naturaleza al tiempo que preserva estas actividades tradicionales y sostenibles. Juntos, podemos salvaguardar los trabajos, los medios de vida, las culturas y el acceso a la recreación de los que dependen nuestras comunidades para las generaciones futuras.
Un objetivo nacional de proteger el 30% de las tierras y los océanos para el 2030 no es compatible con nuestras necesidades energéticas como nación
Mientras Estados Unidos hace la transición hacia una economía de energía limpia, nuestras tierras públicas nacionales sin duda continuarán desempeñando un papel central en la producción de energía. Pero no tenemos que elegir entre satisfacer las necesidades energéticas de nuestra nación y proteger las áreas naturales. A través de un proceso de planificación colaborativa para satisfacer nuestras necesidades energéticas futuras, los administradores de la tierra y las partes interesadas de la comunidad deben trabajar juntos para determinar qué tierras son las más apropiadas para el desarrollo energético y qué tierras aún están en condiciones naturales y deben administrarse para preservar la biodiversidad. Con la ayuda de una planificación inteligente y colaborativa, podemos reducir la huella de uso de la tierra necesaria para las fuentes de energía y trabajar juntos para cumplir una meta de 30×30.
Los objetivos de energía renovable de la administración Biden están en conflicto con sus objetivos de biodiversidad. ¿Cómo puede la administración lograr emisiones netas de carbono cero para el 2050, lo que los científicos dicen que puede requerir paneles solares y turbinas eólicas en más de 225,000 millas cuadradas de tierra, mientras protege el 30% de las tierras para el 2030?
El compromiso de la administración de alcanzar emisiones netas de carbono cero para 2050 y proteger el 30% de nuestras tierras y océanos para 2030 son objetivos visionarios que trabajarán en conjunto para mejorar los impactos del cambio climático y salvar la naturaleza tal como la conocemos. Para cumplir con estos ambiciosos estándares, los administradores de tierras y las partes interesadas de la comunidad deben trabajar juntos para determinar qué tierras son las más apropiadas para el desarrollo de energía renovable, qué tierras aún están en condiciones naturales y deben manejarse para preservar la biodiversidad, y dónde la energía renovable y la conservación podrían ser compatibles. . Requerirá soluciones reflexivas y colaborativas para garantizar que Estados Unidos satisfaga sus necesidades energéticas al tiempo que salvaguarda los medios de vida tradicionales y preserva nuestra vida vegetal y animal para las generaciones futuras.
Un objetivo nacional de proteger el 30% del océano para el año 2030 socavaría a los pescadores comerciales de Estados Unidos, que ya trabajan duro para gestionar la pesca de forma sostenible.
De hecho, las pesquerías estadounidenses se encuentran entre las mejor gestionadas del mundo. En los últimos 15 años, hemos logrado un progreso significativo en la reducción de la sobrepesca y la reconstrucción de poblaciones de peces agotadas y hemos mantenido la cantidad de pescado capturado por los pescadores de Estados Unidos, todo mientras ampliamos áreas fuertemente protegidas de menos del 1% al 23% del océano de Estados Unidos. Las pesquerías prósperas y las áreas marinas protegidas pueden coexistir, y ya lo hacen. Necesitamos una gestión pesquera sólida, así como áreas marinas protegidas sólidas para mejorar la seguridad alimentaria, la conservación de la biodiversidad y los resultados climáticos. Las áreas marinas protegidas sirven como una cuenta de ahorros para proteger lugares vulnerables y de importancia ecológica y ayudar a reconstruir las poblaciones fuera del área protegida, un resultado que beneficia a los pescadores, las comunidades costeras y los animales del océano por igual. El esfuerzo para garantizar que el 30% del océano de Estados Unidos esté protegido para 2030 debe ser impulsado por las partes interesadas locales, incluidos los pescadores comerciales que son fuertes conservacionistas y cuyos medios de vida dependen de la salud del océano.
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